Literatura Cronopio

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MAYO 26

Por Bayron Ramírez Agüero*

Uno
podría ser
(sin mayores preocupaciones)
ese abejón
que insiste en golpearse
una y otra vez
en la misma lámpara,
de la misma calle,
con la misma fuerza.

 

LA SOMBRA NO SABE

La sombra no sabe predecir su propia altura,
los niños acaban por desaparecer entre sus prendas.
Los espejos se rompen en catarsis,
los ojos de los gatos deciden encallar vientre abajo
y ella ni siquiera se da cuenta.
Atacama y desmemoria. Prisión y caos:
La sombra no sabe predecir su propia altura.
El temor no la abandona. No la salva la palabra crucifijo.
La muerte acecha, decidida,
sin embargo, no la alcanza.

¿De dónde regresa ese sonido de pasos estancados;
movimientos perpetuos?

De carbón se ahoga el poema entre sus brazos.
Los hijos de esta sombra llevarán consigo
la violencia de la duda, una lágrima encarnada en soledad.
Y los hijos de sus hijos,
como caballos arrojados al océano,
terminarán por renunciar al trote de las horas,
darán espacio a otro vacío,
serán fantasmas extasiados de memoria.

 

RUTA

Como tortuga que retorna
me tambaleo
me arrastro en línea recta
rumbo al vientre de los años.
No tengo alas que me pesen.
No tengo raíz sobre esta tierra.

Renuncio a lo que mi cuerpo ama;
a la boca semiabierta
de esa mujer que me conoce, renuncio;
a todos los libros transitados,
a la ciudad que me persigue.

Como tortuga que retorna me dispongo a la marea.
Renuncio a lo que mi mente espera
de su propia mente, de su propia espera.
Tocado por el agua, me vinculo a la caricia:
Soy un hijo nuevo que perdona su conciencia solitaria:
el absurdo.

La última ola pestañea sal sobre mi abdomen.
La ola siguiente bautiza mi pecho sin dudarlo.

Como tortuga que retorna
me abro el caparazón. Suspiro
y se resguarda en mis pulmones
el caos primigenio; la razón del huracán que desahoga
al dios
en su colapso.

Tocado por el agua, como tortuga que retorna,
me declaro en pie sobre este mundo.
Reconozco que esta voz
necesita del aire como el fuego.
Reconozco que estos huesos
son tan solo un soplo de destino sobre el barro.

 

EPITAFIOS

I

Hay un sinfín de cosas rotas que uno no puede nombrar
sin desmoronarse.
Hay un sinfín de cosas rotas de las que uno no puede escapar
sin ligaduras.

II

Aunque hubiera existido una mirada
capaz de apaciguar aquella desolación,
de igual manera su voz estaría como ahora,
mimetizada con el viento.

III

Tal vez pudo ser, pero no.
Aquí yace la última noche.
Aquí yace una estrofa sin música del gran poema.

IV

Alguien llora.
Aquí yace una espina del universo.

___________

*Bayron Ramírez Agüero es poeta y editor literario costarricense, nacido en San José en el año de 1997. Es estudiante de licenciatura de Filología española. Su primer poemario, Entropías, fue publicado por la editorial estadounidense Nueva York Poetry Press, en 2018. Ha participado en varios simposios y eventos literarios en su país. Obtuvo el primer lugar en el Certamen literario de la Asociación de Estudiantes de Filología UCR: Categoría de poesía 2017. Ha participado como poeta invitado en festivales de poesía tales como: el XVI Festival Internacional de Poesía de Costa Rica, Transitarte Costa Rica. Escritor invitado en el Festival Desampa Joven III edición Costa Rica. Es miembro activo del taller literario Francisco «Don Chico» Zúñiga. En 2018 obtuvo el Primer lugar en el Certamen Literario Brunca organizado por la Universidad Nacional de Costa Rica.

 

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