LOS PELOS DE LA MODERNIDAD
Sin marco teórico y sin una tesis que oficie en favor de la discusión, quiero decir algunas cosas sobre el país donde me tocó nacer, solo por decirlas o, quizás, mal-decirlas, o conjurarlas, quizás… y lo digo así para que nadie pierda el tiempo en estas cosas sin ninguna razón de peso, que a decir verdad, a mi, poco me importa, la razón digo, que no las cosas … o mejor sería decir, cosas sin patas ni cola como su contexto, y su contenido y todo tipo de pretextos que por allí nunca sobran, como las manos de un buen ladrón multiplicadas en la masa deliciosa de lo que no es suyo, pero que tiene que serlo para poder reafirmar su carácter, su identidad y su bandera… y para no ir muy lejos en los pormenores de la lógica y la gramática, voy a dejar mi “diatriba” simplemente como una letanía a la virgen de los sin-sabores, o como un homenaje a la madre Laura, o como una lista apresurada que elaboramos unos segundos antes de irnos al mercado, aunque haya esos que siempre compran de memoria… esos pocos adictos al sueño que la mala conciencia nacional y literaria ha menoscabado y ninguneado con tanta frecuencia, y que los excesos de los gramáticos de la razón ha sacrificado a su amo de turno…
Que Bush los saque de penas y los lleve a descansar…
Los poetas colombianos cuando se consagran o los consagran, después de haber consagrado sus manías (-el quién y el por qué nunca aparecen por ninguna parte de forma definitiva-), se hacen a la idea, y se lo creen, que su patria es el mundo entero y postrero y verdadero y que ya todo esta dicho… después, incluso, dejan de escribir para consagrar el tiempo “obligado” del acto creador a hacerles creer a otros su creencia… y se inventan su iglesia y sus feligreses y, por supuesto, la muchacha que les limpia la casa… y como los poetas poco leen y menos se leen entre si, creo que tienen serios problemas de memoria-… olvidan tan fácilmente aquello de Martí que dice: cree el poeta orgulloso que el mundo entero es su iglesia…
Y eso que esta afirmación está en la primera página del libro que ustedes todos bien conocen, y que es todo lo que ellos se atreven a leer cuando no es que se la pasan todo el tiempo leyéndose a sí mismos… por no entrar en contradicción con su propia obra, por supuesto … y es que los poetas solamente se leen a ellos mismos y generalmente con los ojos cerrados. Hace poco tuve la fortuna o el descalabro, ya que últimamente tengo pesadillas que no son las mías, de conocer a un poeta que no leía nada de otros poetas y ni siquiera narradores, porque tenía miedo, me dijo, de encontrar algún poema o verso, que fuera mejor que lo que el había escrito y entonces sí tendría que ponerse a leer en serio, lo que no quería, -me dijo igualmente con una sinceridad que ponía los pelos de punta-, para no tener que dudar ni un solo instante de su obra… con estas cosas tan humanas, a uno no le queda de otra que darle la razón a Platón, que los expulsó, y con mucha razón, de su república ideal…
Que Bush los saque de penas y os lleva a descansar…
Entre los escombros alguien, accidentalmente, se agacha y se saca o recoge una perla… nadie se da cuenta, por supuesto, que hacía parte de un collar ya hace mucho tiempo roto y hechos pedazos y perdido por ahí y para colmo de ingenuos, olvidado y humillado y ya desvalorizado… Para el afortunado sin fortuna, es una perla única, irrepetible en su unicidad, irresistible, inimitable e insustituible en su mismisidad… y pare de contar, si uno quiere que la letanía tenga su efecto en la estructura gramatical… y entonces, la aldea universal, o mejor sería decir el universo bobalical o su reverso, se pone a temblar de rodillas ante el nuevo profeta o elegido, o ante la imagen que le da vueltas a la torta y mas vueltas hasta que en la pupila todo se reduce a la mirada implacable de la nueva divinidad…: el elegido de turno, que casi siempre repite y no se cansa de repetir, aunque siempre sea lo mismo, el nuevo poeta nacional, el iluminado que le faltaba a la lista de los elegidos…. Y es que, tan acostumbrados nos tienen desde antes del comienzo a los santos, que la santidad se compra a precio de gallina flaca en cualquier iglesucha… y de esa mirada y sus delirios estéticos vivimos y soñamos y nos dejamos los dientes y las uñas y nos rompemos la madre con una fidelidad increíble hasta sentir que somos uno con la divinidad… lo mismo que Juan Valdez y sus sacos de café y la mula y el poncho del presidente…
Que Bush lo saque de penas y los lleve a descansar…
Siento mucho haberme salido de los límites propuestos en el vacío de la tesis, -no en vano se es hijo del padre-, y haber convertido mi letanía en una confesión sin fundamento y sin conocimiento de causa y sin marco teórico… solo se trata que lo anterior, también valga para la música “moderna” que se hace en Colombia. Ustedes saben muy bien los nombres que la han consagrado en su consagración. No pasan de dos o tres… y ya todos creemos y juramos que hemos inventado el Rock-and-Roll y el Hipop… ciegos, no hacemos el mínimo esfuerzo para al menos imaginar la cantidad de agua que ha pasado por el molino… y eso que hasta la gallina en su inocencia sabe del destino del diamante que de casualidad va a parar a su molleja… y si continúan los problemas nemotécnicos lean otra vez a Fontanarrosa o a Arreola… Pero es que con tantos problemas y desesperanza, uno necesita agarrarse de algo, creer en algo, identificarse con algo… Si ese es el caso, yo les recomendaría entonces leer a Mutis y a su amado Conrad…
Que Bush los saque de penas y los lleve a descansar…
Y en cuanto al cine, mejor debería callarme porque podría ser ofensivo… pero qué mas da, ya que para mis compatriotas cualquier cosa que se diga sobre Colombia que no suene a arequipe con fresas, bandeja paisa, o ajiaco bogotano que no boyacense, es una ofensa… ¿ podríamos acaso decir que se trata solamente del comportamiento normal de cualquier ser humano que vive todo los días re-mordiéndose su propia identidad en la del otro que no reconocen…? Así que no vendría de mas recordar que la historia de nuestro cine no pasa de dos o tres películas de dudosa caligrafía, que nuestras carencias nos han hecho inflar hasta sacar callo en los dientes… y si sumamos la cantidad de errores técnicos y “narrativos” –y en cuanto a la actuación ni hablemos- que hacen aún más deficiente el concepto de “historia” como producto acabado, no tendríamos mas remedio que borrar tal historia, por deficiencia y ausencia de, y quedarnos con las dos pedazos de película que se salvan del naufragio… sería bueno que recordemos con generosidad y cordura que nosotros no hemos inventado el cine… que algo en nuestro país y en nuestra conciencia sigue oliendo a pañales… que no es tan malo reconocer que muchos adultos necesitan pañales para poder continuar con sus sueños… y no me vengan con el cuento de que es la falta de recursos… o de que mi mirada está parcializada… que vivo en otro país y que he perdido la noción de la realidad y del tiempo… Tendrían que pensar un momento antes de restregarme eso, en dónde y quiénes hacen el buen cine de nuestro tiempo, y ojo que no hablo de Gringolandia en primer lugar… también podrían decir que es que yo también soy parte activa de la desgracia que nos habita y define y que, por lo mismo, no puedo ver las perlas preciosas con claridad… la verdad es que yo no creo en la maldición de Caín… por favor que nos quede claro: en cuanto al cine, aunque casi todo esta hecho, a nosotros todo nos queda por inventar y de hacer, ni que decir… pero es que como bien dice Fontanarrosa nosotros somos incapaces incluso de inventar nuestros propios errores… los importamos y después los vendemos como la panacea… y si no me creen piensen un momento en nuestra televisión y nuestros políticos y nuestros poetas nacionales que ya hace mas de medio siglo siguen siendo los mismos… con su odio, su incapacidad para ver lo otro y su culto desesperado a la personalidad…
Que Bush los saque de penas y los lleve a descansar….
Contamos, eso si con ser los reyes de la telenovela… eso no nos da, ni nos quita… y con tantas desgracias no está mal que creamos en algo, aunque sea en la nada para no acabar de naufragar… pero sería bueno que no confundamos un culebrón (incluso uno de muy buena calidad… -no tengo nada en contra el género-) con una buena serie, o una película… si guardáramos esto en la cabeza, no tendríamos tantos galanes tan bien enculebrados llevando sus culebras al cine y haciendo el “oso” todo el tiempo, como bien se dice en Colombia para cosas de gran valor que no tienen ninguno, es decir para las tonterías y ridiculeces… la exageración, el chiste de mal gusto y la híper-ventilación vienen bien en este género, aunque yo no me lo creo, pero en otros es la economía del gesto y el distanciamiento de la materia en cuestión lo que cuenta… cosas estas no tan fáciles de lograr… y lo que da mas pena, es saber que los buenos actores en Colombia, para poder seguir comiendo, no tienen mas remedio que enculebrarse… y mas pena aún, que el buen teatro, que todavía tenemos, termine matando culebras en la televisión…
Que Bush los saque de penas y los lleve a descansar….
Lo otro que se me había escapado de la lista, no debería ni siquiera nombrarlo… debería ponerle aquí punto final a este asunto y ya… Tiene un nombre propio que cada vez que me llega a los labios, o a los ojos en las primeras páginas de los periódicos me pone la piel de gallina… no de susto, sino de vergüenza, aunque tengo que reconocer que la velocidad es cosa que siempre me ha dejado un sabor amargo en la boca. Uno nunca entiende detrás de qué andan corriendo los colombianos con tanta prisa… o de qué andan huyendo con tanta devoción… aunque eso es lo que últimamente hemos hecho muchos, huir de nosotros mismos para poder ser o al menos estar, correr detrás de nada para poder existir o salvar el pellejo… afortunadamente a este señor, mal empulgado, que anda por allí con su divinidad dibujada en la frente como un tatuaje de mal gusto, terminó refundido y confundido como él, en el despelote de la Nascar… que allí está bien, ya que allí no se sabe quién es quién… ¡ oh no, que oso! -diría una colombiana de la clase media alta con tendencias inflacionistas- y con razón… ¡-nos ha dejado como un culo: sin imagen, sin feligreses y sin altar-¡ Solo yo… que a veces gano, gracias a los milagros del divino niño, el sagrado corazón y últimamente la madre Laura y hasta el Hidalgo Escobar…
Que Bush los saque de penas y los lleve a descansar
Me acaba de llamar mi esposa para decirme que no se siente bien (que coste que no es colombiana, por eso dije esposa y no mi mujer). Además, tengo que ir a recoger a mi hija a la escuela, un poco tarde hoy porque está tomando clases de canto… lo cual me aterra a veces, tengo que confesarlo… nunca se sabe si con el tiempo se le dé por eso de meterse de poeta nacional, o de cantante o de actriz… tengo miedo de que ella también termine inventando el Rock-and-Roll, o bien enculebrada a 300 millas por hora… así que les pido disculpas, pero no puedo y no quiero seguir con mi letanía… que la madre de todos los sin-sabores se apiade de mi pereza y de mis malos modales que yo me encargo de mis lagunas y mis omisiones gramaticales… que después de recoger a mi hija tengo que ir de compras y no es fácil, ya que soy uno de esos que compra de memoria… lo que pase con mi esposa enferma después se lo cuento… It is a deal!!!
PD.Tampoco los submarinos caseros que inventamos para transportar droga son tan originales como creemos… lo único que podría decir a su favor es que son ingeniosos… y en cuanto a la droga no tengo nada en su contra…
PD.No se cómo llegó a las manos de uno de mis familiares, un DVD sobre la vida y andanzas del hidalgo Escobar. La primera vez que pusieron el DVD la casa se llenó de colombianos… no sabría decirles de donde salieron tantos… lo único que puedo decirles es que en la medida en que la historia avanzaba su rostro se transformaba con todos los tintes de la felicidad y el asombro… nunca había sabido hasta ese momento lo que llaman orgullo nacional… ¡Qué magnifica película!
PD.Acabo de recibir un e-mail de un ciudadano colombiano de buena fe, que me dice que acaba de ver una luz en el túnel… Me imagino que de lo que habla es de Ugly Betty… cosa que nada tiene que ver con Colombia en la tierra del éxito. Por aquí todo se rehace o se deshace a la medida del mercado… por aquí el comerciante Midas todo lo toca y lo convierte en oro… y es que de los libretos originales no dejaron ni la sombra…
PD.Sin comentarios: que bueno que Ciro Guerra se haya atrevido, entre tantas vicisitudes, a filmar Embrace of the Serpent. Si alguien ha capturado el alma y el placer y el dolor de la selva amazónica, lugar sonde crecí y viví y, quizás, fui feliz, es él, o mejor digamos: esta película. Esperemos que ahora si los políticos de turno se den cuenta del tesoro que tenemos para seguir destruyéndolo por unos cuantos dólares de mas que al final de cuentas, solo nos dejan desiertos, familias indígenas desplazadas y dolor… Felicitaciones mil a todos los que participaron, de una u otra forma, en esta empresa… y no me quito el sombrero porque no uso.
PD.De vieja data: En la conferencia de literatura latinoamericana de una prestigiosa universidad AMERICANA, un intelectual recién sacado del horno, se levanta y pregunta con seguridad y mucho orgullo: ¿es cierto que en Colombia se habla el mejor español del mundo…? El escritor colombiano José Cardona, se levanta, casi como si la vergüenza y la timidez lo hubieran convertido en un batracio, y responde: “sí Doctor, el mas mejor español del mundo”… y salió de la sala, y ese mismo día, sin despedirse de nadie, como un animal maltratado, abandonó la conferencia…
PD.Colofón: La consagración de la madre Laura, me ha dejado sin soporte espiritual y despierto de miedos que no quiero recordar… eso era lo último que nos faltaba: una nueva santa para que los asesinos se pongan un nuevo escapulario en el brazo que los proteja y los cuide de cualquier vicisitud, antes de matar… tengo miedo de que con el aumento de la santidad, aumenten también los asesinatos y los asesinos, ya que parece que en Colombia la santidad y el crimen crecen y se alimentan de manera proporcional… y aunque pueda parecer exagerado y equivocado, tengo miedo de que Maltus tenga ‘razón”…
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Acronopismos y otras delicatesen Cronopio es la nueva columna de opinión de temas variados, de Manuel Cortés Castañeda, para Revista Cronopio
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* Manuel Cortés Castañeda, nacido en Colombia, es licenciado en Español y Literatura de la Universidad Nacional Pedagógica (Bogotá), director y actor de teatro. Cursó estudios de doctorado en la universidad Complutense (Madrid). Enseña español y literatura del siglo XX en Eastern Kentucky University. Ha publicado seis libros de poesía: Trazos al margen. Madrid, España: Ediciones Clown, 1990; Prohibido fijar avisos. Madrid, España: Editorial Betania, 1991; Caja de iniquidades. Valparaíso, Chile: Editorial Vertiente, 1995; El espejo del otro. París, Francia: Editions Ellgé, 1998. Aperitivos, Xalapa, México: Editorial Graffiti, 2004; Clic. Puebla, México: Editorial Lunareada, 2005. Dos antologías de su trabajo literario han aparecido recientemente: Delitos menores, Cali, Colombia: Programa editorial Universidad del Valle. Colección Escala de Jacob, 2006; y Oglinda Celuilalt, Cluj-Napoca, Rumania: Casa Cărţii de Ştiinţă, 2006. Ha sido incluido en antologías tales como Trayecto contiguo. Madrid, España: Editorial Betania, 1993; Los pasajeros del arca. La Plata, Buenos Aires, Argentina: El Editor Interamericano, 1994. Libro de bitácora. La Plata, Buenos Aires, Argentina: El Editor Interamericano, 1996. Donde mora el amor. La Plata, Buenos Aires, Argentina: El Editor Interamericano, 1997. Raíces latinas, narradores y poetas inmigrantes, Perú, 2012. Además, escribe sobre poesía, cuento y cine. Actualmente está traduciendo al español textos de poetas norteamericanos de las últimas décadas: Charles Bernstein, Leslie Scalapino, Andrei Codrescu, Susan Howe y Janine Canan, entre otros.