Sociedad Cronopio

CHINA Y SU EVOLUCIÓN ECONÓMICA

Por Mauricio Monroy*

La China comunista de hace unas décadas basaba su modelo económico en una autarquía, donde sólo se pensaba en el autoabastecimiento de la población. Era una economía completamente cerrada. Sin embargo, hacia la década de los ochenta, se presentó lo que algunos autores denominaron «el milagro chino», cuando el Estado por medio de reformas a la ley,  comenzó una transición económica al pasar de un régimen cerrado y autoritario a una economía de tipo global. Fue en ese momento donde se dieron los primeros pasos para consolidar la propiedad privada y sus diversas formas de  asignación y expansión.

Entonces era evidente que China contaba con todos los argumentos para convertirse en un gran competidor mundial de productos y servicios. Tenía muchas ventajas: por ejemplo contaba con una fuerza laboral de 798 millones de personas que se convirtió, de la noche a la mañana, en una porción significativa del comercio mundial. En la actualidad, el nivel de educación en China es alto comparado con países de Europa y América Latina. Por eso, el 12% de la población en China cuenta con el mismo grado de educación que el 80% de la población en América.

Teniendo en cuenta sus diversas fortalezas y conocimientos, el Dragón Asiático decidió ingresar en el ámbito del comercio global, generando mayores ingresos para su floreciente economía. Fue evidenciando además muy buenos porcentajes de  disminución de la pobreza. En cuatro años (1980 – 1984) China logró una reducción considerable de esta variable y se puso a tono con el incremento del ingreso nacional, el cual comenzó a mostrar  resultados crecientes en las cifras de su Producto Interno Bruto (PIB).

El crecimiento económico de China hacia los años noventa fue del 8%, 5 puntos por encima del crecimiento de los Estados Unidos (3%). Estamos hablando de una de las economías con mayor proyección en los mercados internacionales y que cada vez le irá quitando mayor participación al comercio americano en el mundo de los negocios.

Ese marcado crecimiento se vio impulsado por diferentes aspectos. Es bueno destacar el buen manejo de los costos de innovación, la diversificación de las estrategias de costos, así como la implementación de acciones que permitieron buscar nuevos caminos y llegar rápida y masivamente a millones de clientes en el mundo.

Por lo tanto, el potencial chino se basa en el conocimiento y el avanzado nivel de educación que posee la nación. Es evidente que el cambio de estrategia de las empresas chinas ha sido determinante para romper el famoso paradigma de que los productos chinos son imitaciones baratas y de mala calidad. El costo de innovación es la base de la estrategia de cambio y tiene como fundamento las siguientes premisas: Las empresas chinas están ofreciendo alta tecnología a bajo costo, por ejemplo el caso concreto de los servidores de alta capacidad.  Bajos costos en busca de mejores precios para los clientes, sin afectar la calidad y, a la par, motivar la investigación y el desarrollo tecnológico en las diferentes líneas de negocio.

La inversión en ciencia y tecnología es del 1.5% al 2% del Producto Interno Bruto, hecho que posiciona al país en niveles de competitividad superiores. Dicha inversión se ve reflejada en la aceptación del nuevo modelo de desarrollo económico, mejora ostensible en las relaciones comerciales con el resto del mundo, y ha creado un ambiente propicio  para la modernización y democratización del Estado.

La manufactura no es el único sector en el cual ha incursionado la producción nacional, también han invertido con éxito en la prestación de servicios, cuestión que ha venido ganando terreno en forma acelerada, convirtiéndose en el cuarto exportador de servicios en el mundo en puntos clave como el transporte, la logística, el sector financiero, entre otros.

De acuerdo con el excelente comportamiento de la economía china en el comercio mundial, y con el aumento considerable de sus ingresos, podemos apreciar cómo este país comenzó a pagar su deuda externa y a adoptar una posición de austeridad y ahorro que al final le permitiría un mayor nivel de inversión a nivel mundial.

China invierte en las economías de los países más fuertes. Compra bonos del Tesoro de los Estados Unidos, adquiere papeles de renta fija y renta variable en Europa. También se interesa por los fondos mutuos más importantes del mundo y analiza las diferentes alternativas de inversión en algunos países de América Latina, impactando así a la economía mundial con la eficiencia en inversión de sus reservas internacionales.

Pero no todo es positivo en la economía china, existen algunos problemas que amenazan el futuro del dragón asiático. Este país maneja altos consumos de ‘commodities’: es decir, consume la mitad del cemento, un cuarto del acero y dos quintas partes del cobre del mundo.

Se ha constituido en el segundo consumidor y el tercer mayor importador de petróleo en el globo. Estas cifras nos permiten diagnosticar una futura crisis mundial provocada por los precios de las materias primas. Además de no contar con recursos naturales potenciales como el petróleo y en especial el agua; se han presentado serias ineficiencias en el manejo de este recurso, perdiendo grandes cantidades de hielo y líquido, lo que ocasionará alta escasez en un futuro no muy lejano.

Otro problema grave que tiene China es el medio ambiente. Cuenta con las cinco ciudades más contaminadas del mundo. Recordemos que este país enfatizó en crecimientos «intraindustria», lo cuál genera altos grados de contaminación ocasionando aumentos en costos y la necesidad de construir nuevas plantas de generación de energía a base de carbón.

La inequidad también es otro flagelo que ha venido afrontando esta economía, ya que al pasar de un sistema comunista a un modelo más liberal con carácter global, la concentración de la riqueza se ha acentuado cada vez más, hasta tal punto que se afirma que el 50% del PIB llega tan solo a un 10% de la población.
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*Administrador Empresas Universidad Central, Curso de Alta Gerencia Financiera Universidad Central, Especialista en Finanzas Corporativas CESA y MBA Universidad Sergio Arboleda, Tecnológico de Monterrey. Docente de las universidades Jorge Tadeo Lozano, Javeriana, Politécnico Grancolombiano .