PANDEMÓNIUM EN VENEZUELA
Por Pedro Hoyos Salcedo *
Pregunta, con respuesta para la historia: ¿Es ilegal que un inhabilitado inhabilite?
Simón Bolívar responde, desde el más allá: «sí».
Los fantasmas de Miraflores responden, desde el más acá: «no».
Durante los últimos días el viudo de Correa, el charlatán; el viudo de Evo, el bobalicón iletrado; el viudo de Fidel, el fusilador; el viudo de Chávez, el desorganizador vende patrias, y el viudo de Ortega, el borrachín, todos ellos, se han dado (se dieron) a la tarea de la distracción para lograr un alargamiento en el poder. Los sátrapas inventan con argucias su propio oxígeno.
Los atropelladores de la Venezuela Bolivariana del siglo XXI están practicando una de las técnicas lingüísticas cubanas de la distracción y es la de los neologismos falsos, la técnica de las palabras engañosas nuevas, la invención de un lenguaje confuso y ambiguo que aparenta una legalidad pero que no la tiene.
Los lingüistas maburristas, del usurpado Palacio de Miraflores, decidieron hace unos días que «defender la patria» significaba «ser un apátrida»; después, aprobaron que «luchar por la democracia» significaba «ser un traidor»; a continuación, dijeron que «defenderse con las manos contra los fusiles asesinos» significaba «ser terrorista»; luego, gritaron en tropel que «luchar por sostener una empresa o microempresa propia» significaba «exprópiese»; un día, se les ocurrió que «ser apoyado por 60 países democráticos» significaba «ser amigo incondicional del imperio»; sorpresivamente, inventaron que «ayuda humanitaria» significaba «comida envenenada»; también, descubrieron que cuando los estudiantes se defendían de las tanquetas de agua asesina con «las bombas caseras, orgánicas, naturales y artesanales puputov», eso significaba «guerra química»; días después, dijeron en coro que «cuando no haya argumentos ni evidencias probatorias en contra de un inocente» eso significaba «terrorismo espiritual que otorga penas espirituales»; asombrosamente, expresaron ante el mundo que «casa por cárcel incluyendo un monitoreo electrónico las 24 horas, los 7 días de la semana» significaba «libertad, fuera de La Tumba y de El Helicoide»; recientemente, los representantes de la Real Academia de la Lengua Maburriana acuñaron que «apagón en toda Venezuela, electricidad por la mañana y tinieblas por la tarde y por la noche» significaba «el imperio, con las iguanas devoradoras de los cables de alta tensión, con Guaidó y con una bala de fusil, todos juntos, destruyeron las hidroeléctricas en Guri». Llenos de felicidad los de Miraflores dijeron, todos a una, que «quemamos la ayuda humanitaria en el puente internacional Tienditas» significaba «Guaidó y el imperio lo hicieron»; un día, al amanecer, canturrearon en un corro saturado de rostros cetrinos que «el ‘Yo’ egoísta de Nicolás M. M. significaba el ‘yo’, humilde y sensato del pueblo de Bolívar»; para asombro de los millones y de ‘las millonas’ de venezolanos, ellos, los sátrapas, rebuznaron neuróticos que «asaltar, quebrar, golpear, robar y sembrar evidencias falsas en las casas de los miembros de la oposición» significaba «estamos investigando para llegar a la verdad»; alguien exclamó ebriamente: «digamos, de ahora en adelante, que las falsas verdades» significarán «éstas son las verdades verdaderas»; el director, mal payaso, de la Corte inconstitucional y usurpadora definió que «las velas, las linternas, las lámparas y los tanques azules, que dizque iba a regalar, para recoger y guardar agua» significaba «ésta es, incrédulos del mundo, la electricidad bolivariana y socialista del s. XXI» y, finalmente, para asombro de todos, acaban de lanzar, desde el solio del vapuleado y pisoteado Bolívar, la palabra mágica salvadora y emblemática por su sinuosidad: «inhabilitado» que significa paradójicamente según el diccionario publicado en el ‘Mazo adentro’, «el inhabilitado inhabilita».
Con toda esta sarta de mentiras y de malabares verbales, con toda esta cadena de signos lingüísticos fallidos semánticamente por presentar significados y significantes vacíos y sin sentido, con este rosario de oraciones demoníacas no piadosas, y con la astucia de Tartufo que les caracteriza, han «inhabilitado» al habilitado presidente de la República de Venezuela, ingeniero, Juan Guaidó. Afortunadamente, el presidente constitucional, no usurpador, Juan Guaidó, es un hombre humilde pero dialéctico, es una persona enfocada en los puntos centrales del problema venezolano, es una persona que no juega a la ambigüedad ni a la distracción, y ha desvelado inteligentemente el significado real de «inhabilitado». Ha expresado que «los entes que inhabilitan en Venezuela, (AN-Contralor) todos ellos están inhabilitados. No existen constitucionalmente, por lo tanto, son corpus ilegales, y si son ilegales, no pueden inhabilitar porque serían los inhabilitados inhabilitando».
La abuela venezolana confundida en su cocina oscura y vacía le dice al mundo tranquilamente: «¿será que saldremos de este pandemónium, endemoniado?», «¿será que es posible que un inhabilitado, inhabilite?», ¿será que el mal encarado, falso e inconstitucional Contralor descontrolado y descontrolador chavista, de pura sangre, Elvis Amoroso, que no es ni Elvis ni es amoroso, puede inhabilitar a alguien desde su óptica de inhabilitado?, ¿será que cuando el que empeñó a PDVSA, Chávez, rogó a sus secuaces para que nombraran a Maduro en vez del diabólico dios, los estaba inhabilitando para siempre y por siempre?, o ¿será que los miembros de la Real Academia de la Lengua Maburriana tienen la razón de la sin razón que a mi razón razona, cuando, en medio de sus últimas lágrimas de cocodrilo, afirman: «nosotros los inhabilitados, violadores y saboteadores de la Constitución tenemos el poder supremo de inhabilitar desde cuando nos inhabilitó el mentiroso y utópico H.Ch.Fr., antes de irse para…»?
La abuela concluye filosófica y dialécticamente así: «si desde el principio de la creación de la debacle venezolana los inhabilitados han inhabilitado a casi todos los miembros de la oposición, entonces, Dios mío: todos los falsamente inhabilitados (L.L, M.C.M., J.G., L.O., P.P., E.S., D.C., M.R., A.L., F.G. D.S., entre otros), EUREKA, están ciertamente habilitados, porque según la sabiduría bíblica, la hiedra no puede producir frutas y mucho menos las piedras no producen manzanas. El pobre Contralor, ni Elvis ni amoroso, rompió, una vez más y por enésima vez, el hilo constitucional en Venezuela debido a que no es legalmente él quien debe establecer una ‘inhabilitación’ sino el Poder Judicial: ahí tenemos a un ‘inhabilitado’ ‘inhabilitando’».
Para la historia, para todos los incrédulos del mundo, ante Dios, ante los hombres y per secula seculorum, nuestro brillante Simón Bolívar tuvo razón cuando contestó la pregunta inicial: «sí, es ilegal que un inhabilitado inhabilite».
Nota legal: Según la Constitución vigente venezolana (librito azul que enarbolaban diariamente los usurpadores pero que mágicamente desapareció durante sus presentaciones), establece claramente que «No es competencia del Contralor de la república ‘inhabilitar’ a ninguna persona, grupo o entidad. De tal manera que toda ‘inhabilitación’ se establecerá sólo por vía judicial. Será un proceso con evidencias probatorias suficientes, trasparente y en juicio público. Después de esta dinámica legal, justa, abierta y evidente, se procederá a la eliminación de la inmunidad a quien o a quienes competa. Establecido en regla todo el proceso y haberes legales, el Poder Judicial establecerá o reprobará dicha ‘inhabilitación’».
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La columna Collage Cultural Cronopio es una columna de opinión sobre temas de actualidad social, política y literaria.
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*Pedro Hoyos Salcedo es oriundo de Cali, Colombia. Se especializa en la literatura latinoamericana, Siglo de Oro español y la literatura española del siglo XIX. Tiene estudios doctorales de la Universidad de Nebraska, en Lincoln. Ha publicado artículos en los periódicos y revistas literarias más prestigiosas de su país. Ha publicado tres libros: «De Cortés a García Márquez. Ensayos de Literatura Hispanoamericana». Colección Prisma, Editorial Lumen, Lima. Perú. «Ejes temáticos en la obra de Ricardo Palma». Universidad del Quindío, GEDES Editores, Colombia, y «Ningún ser humano es ilegal ni el reino de Dios Tiene fronteras». Universidad del Quindío, GEDES Editores, Colombia. Es autor de dos CD de música, audio digital [Hoyos Familia Grupo Musical], con canciones bilingües nuevas y originales y un cuaderno de ejercicios interactivos para aprender el castellano. Después de diecisiete años de enseñar en la Universidad de Caldas en Manizales, ha venido enseñando en la Universidad Estatal de Augusta en Augusta, Georgia, desde 1995. Ha sido profesor de español básico y avanzado y Literatura Latinoamericana.