EL LIBRO FÍSICO EXISTIRÁ SIEMPRE, INCLUSIVE COMO JOYA
Por Natalia Caguasango*
Cree que hay un libro y un whisky para toda ocasión, ya que lo que realmente importa es su contenido. Su domingo ideal es beberse un buen ron venezolano en compañía del mejor equipo del mundo, el Barcelona, por el cual este afable e inteligente hombre se declara enfermo, club deportivo de aquella mágica ciudad que por culpa de la crisis mundial de 2008 abandonó, y a la cual extraña con toda su alma. Este colombiano hijo de franceses, de piel blanca, cabello negro ensortijado que toca cada vez que se emociona, de ojos café claro que brillan cada vez que recuerda sus travesías por casi medio mundo y al cual le gusta quitarse el reloj para sentirse cómodo es Philippe Vergnaud, gerente general de Ediciones B en Colombia.
Es alto, diría que bastante alto o por lo menos digo eso porque cuando tuve la oportunidad de conocerlo, me sentí casi disminuida físicamente, pero ya cuando se sentó fue otro. Entonces empezó a fumar, a encender cigarrillo tras cigarrillo, a mirar su computador, a sacarle cifras y más cifras y me las iba contando y cuando el Barcelona volvía a su memoria, cambiaba de tema y se estremecía hablando del equipo.
Antes de estar en el mundo de los libros, trabajó con la bebida energizante Red Bull, asunto que me extrañó, porque pasar de un tema comercial de fácil venta, al mundo de los libros… pues, lo vi raro. Pero de los dos trabajos se ha enamorado y los siente en el alma y los defiende, como defiende la posibilidad de trabajar más y más por la cultura que tanta falta nos hace en nuestro país.
Natalia Caguasango: ¿En qué consiste la industria editorial?
Philippe Vergnaud: Como gerente general de una editorial hay que tener dos visiones: una, la comercial, la cual incluye a un número determinado de personas en una empresa y tienes que velar por una rentabilidad específica, y otra visión es la cultural, la de transmitir conocimientos, la de informar, la de difundir. Tiene que existir un equilibrio entre ambas visiones, pues somos un medio que le permite a la industria editorial o al consumidor acceso a libros, sean o no best–sellers y a temas internacionales que posiblemente si no estuviéramos acá, no llegarían.
N.C.: En los últimos días de septiembre, la presidente de Carvajal Educación, Gladys Helena Regalado, afirmó que la editorial Norma no seguirá publicando novelas para adultos, sino libros de no ficción y de autoayuda. ¿Eso en qué beneficia a Ediciones B?
P.V.: Yo hago parte de la junta directiva de la Cámara Colombiana del Libro y sin duda es un mensaje importante para la Cámara. Norma era en el sector adultos, uno de los puntos editoriales de referencia más grandes, pues aún tienen grandes autores vendedores, pero además, ellos tenían una buena apuesta por autores colombianos no conocidos y que este monstruo diga, de un momento a otro: «¡Chao, que me voy a dormir!», preocupa, porque está queriendo transmitir que no hay una buena rentabilidad, que no hay mercado, que somos demasiados y que para qué seguir invirtiendo. Desde el punto de vista de Ediciones B, sin duda es una oportunidad para salir y pescar autores, vamos a ganar ciertos espacios que ellos, entre comillas, «tenían comprados» en ciertas librerías. Digamos que el abanico de opciones se cierra, pero de todas maneras continúa siendo inmenso. Se reduce un poco la oferta con la salida de Norma, seguramente, pero no significativo para decir: «¡Huyy, ahora sí vamos a vender!».
N.C.: Un estudio que se realizó, reveló que el promedio de libros leídos por un colombiano al año aumentó de 1,6 a 2. ¿Por qué es tan bajo a comparación con Brasil que tiene un promedio de 5 libros al año?
P.V.: La cifra de Colombia no me la creo. Estuve en una reunión con la ministra de cultura, Mariana Garcés, y presentaron un video donde según el DANE se leen 1,6 ejemplares por habitante, según un estudio realizado en el 2008. Estoy totalmente seguro que esa cifra incluye al texto escolar ¿Qué pasa? Este texto es obligatorio. Yo diría que nosotros no llegamos ni siquiera a un libro por habitante. España, si no estoy mal, está sobre los 14 y Brasil, como bien lo dices, está sobre los 5 o 6. Tristemente Venezuela está por encima de nosotros y aunque muchos no lo crean, los venezolanos leen más que los colombianos. La cultura ahorro no existe en ellos, por eso van comprando y comprando y el libro que más se vende allá es el de moda.
N.C.: ¿Cómo determinan esas cifras?¿Cada editorial da sus cifras de lo que han ido vendiendo?
J.V.: Es un estudio que hace el DANE. Haz de cuenta un censo: toman una muestra representativa y hay una encuesta que definimos entre la Cámara Colombiana del Libro, Fundalectura y el Ministerio de Cultura.
N.C.: Yo pensaba que cada editorial mandaba sus cifras. Pero bueno… Ahora: no todo el mundo compra libros legales, sino los piratas que adquieren en la calle; además se venden libros de segunda.
J.V.: Esto de los libros es bastante complicado. El Ministerio de Cultura va a comprar este año 3.600 millones de pesos en libros para dotar muchas bibliotecas escolares, para que los niños tengan realmente acceso a ellos, por eso creo que el problema en Colombia es el acceso. Fíjate que en este país sólo hay librerías en las ciudades principales.
N.C.: La tecnología ha estado avanzando y se consiguen libros en Internet. Ya no es necesario comprarlos, pues los vemos en distintos tipos de archivos. ¿Ediciones B cómo se ve en el futuro?
J.V.: Pienso que la sensación de lectura en papel, propiamente eliminarla del mercado, de la cotidianidad es muy, muy difícil. Y yo creo que libro físico existirá siempre, inclusive como joya.
N.C.: ¿Cuál es el libro más vendido de Ediciones B?
J.V.: El libro internacional más vendido es Inteligencia emocional de Daniel Goleman, seguido de Mujeres que corren con lobos, y los libros nacionales más vendidos son ¿Por qué lo mataron? de Enrique Gómez, que plantea varias hipótesis sobre el magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado, y el otro libro es Tras la huella del Almirante de Hernando de la Rosa que es el caso ampliamente conocido del Almirante Gabriel Arango Bachi, a quien acusaron injustamente de un hecho que jamás cometió y la Corte Suprema de Justicia dijo que era inocente.
N.C.: ¿Cuál es el libro más costoso que actualmente tiene Ediciones B?
J.V.: Se llama Alemania 1945 está sobre los $85000 pesos.
N.C.: Y ¿el más económico?
J.V.: Precisamente el de Enrique Gómez Hurtado que cuesta $15.000 pesos.
N.C.: ¿Cuáles son los libros más importantes que Ediciones B sacará a la venta los próximos días?
J.V.: Uno de ellos son los mejores reportajes del periodista Eccehomo Cetina quien trabajó en Radionet, luego en el programa «Séptimo día» y ahora trabaja como reportero en el Canal RCN. Es realmente un libro excepcional, no sólo para los periodistas, sino también para los amantes de la buena reportería.
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* Natalia Caguasango es estudiante de noveno semestre de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Exrternado de Colombia.