Literatura Cronopio

0
324

LA MÁQUINA

Por Melody Freeland*

Me desperté, con una sensación familiar de deja vú.
intento escuchar algo o ver a alguien.
La oscuridad es pesada,
el silencio es ensordecedor;
continúo frotándome los ojos
para ver algo que no está allí.

Solo la oscuridad.
Solo el silencio.
Yo grito a nadie.
Corro a nada.
Nadie me está escuchando.
No hay a donde ir.

Después de horas, mis piernas están entumecidas;
mi garganta está en llamas.
Me desmorono con el alivio de sentir algo;
por fin me siento.

Extiendo mi mano y hago contacto con el metal
frío y suave en mi piel.
Me doy cuenta de que estoy atrapada
como un pájaro en su jaula.

¿Quién me está mirando?

Usando la curiosidad como mi fuente de energía
me levanto y empiezo a rozar el metal
buscando una apertura para escapar.
Me olvido del dolor en mi cuerpo,
cientos de preguntas nadan por mi mente.

¿Estoy sola?
¿Qué existe fuera de estas paredes?
¿Se puede escapar?
¿Por qué nadie me contesta?

Justo entonces mis preguntas desaparecen,
mi pulgar toca un agujero en el metal.
Lo siento muy pequeño.
Por primera vez me siento el latido del corazón en mi pecho.
Respiro profundamente,
muevo mi ojo para encontrar mi pulgar.

Entonces lo veo;
veo todo.
Mi mirada encuentra el espejo,
me deja ver a todas las personas
en sus propias cajas de metal,
a mí misma en mi jaula de metal.
Pero todos están durmiendo.

«¡Despiértate!»
Sin respuesta.
«¡Desconéctate!»
Nada.
«¡Escápate!»
Ni un solo movimiento.

En ese momento entiendo mi posición.
Una ola de desesperación me inunda.
Nadie me escucha,
no tengo una voz.
Viviendo en una ficción
no existo en la realidad.
A esta máquina no le importan mis dolores,
ni mis anhelos,
ni mis esperanzas.

Y con esta comprensión,
niego la ausencia de mi propia existencia.
Entonces

me desperté, con una sensación familiar de deja vú…

POBRECITO PÁJARO

Pobrecito pájaro.
Nunca tuvo un chance.

Pobrecito pájaro
atrapado en su jaula
construida de deseos perdidos.

Pobrecito pájaro
que me mira en mi libertad
sin la esperanza de encontrar la suya.

Pobrecito pájaro
con tantas canciones melodiosas
cayendo en oídos sordos.

Pobrecito pájaro.
Sus sollozos hacen eco
contra las paredes
que definen el volumen de su voz.

Pobrecito pájaro.
Cómo su existencia me mata
y me lleva a las rodillas.

Pobrecito pájaro.
Nunca tuvo un chance.
Escribo para que
Sus melodías sigan.

Pobrecito pájaro.
Ya no te escucho.

MI EXISTENCIA

Yo existo en el breve segundo
entre el momento presente.
Y justo después
cuando ese momento se convierte
en un recuerdo de la memoria
para seguir viviendo
para siempre
como el espectro
que no me dejará en paz.

___________

* Melody Freeland es estudiante de postgrado en el programa de Maestría en Español de la Universidad Estatal de Bowling Green, Ohio, USA. Especializada en América Latina y el Caribe, sus investigaciones tienen un enfoque en estudios literarios y cinematográficos, con énfasis en la representación de la mujer a través del análisis de cuestiones de género y sexualidad. Su ensayo «La Mujer Silenciada dentro de la Máquina Patriarcal» ha sido publicado recientemente en la Revista Argus-a (Argentina – USA; Marzo 2019). Se le ha otorgado además una beca de investigación para continuar su trabajo educativo con organizaciones sin fines de lucro para abordar cuestiones de justicia social y la enseñanza de las matemáticas a estudiantes de herencia.

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.